Entre Pinos y Atardeceres: Sesión de Preboda de Silvia y José Luis en Liencres
Pinos y Atardeceres en una playa de arenas doradas en Cantabria, la mezcla perfecta para una buena sesión fotográfica de enamorados.
«Entre Pinos y Atardeceres: Sesión de Preboda de Silvia y José Luis en Liencres»
Silvia y José Luis para su preboda nos trasladaron un deseo claro: querían que su sesión de preboda fuera lejos de lo convencional.
Madrid, su ciudad, les regala el bullicio cotidiano, pero soñaban con un escenario donde la naturaleza fuera protagonista, así que decidimos Liencres, con sus bosques de pinos y la playa de Valdearenas, lienzo perfecto para pintar su historia.
Entre los secretos del bosque
La tarde comenzó entre los pinares de Liencres, un lugar en donde todavía, a pesar de los visitantes, el tiempo parece detenerse.
Los rayos de sol se cuelan entre los árboles, dibujando patrones de sombras y claros dorados sobre el suelo.
Entre risas cómplices y miradas que delataban sus años de complicidad, exploramos senderos escondidos y claros bañados de luz que hay en el pinar.
Su espontaneidad, sus momentos felices pero llenos de vidas, quedaron grabadas en las fotos que hicimos y que resumen su conexión: natural, vibrante y llena de alegría.
El beso del atardecer en la playa
Conforme el sol comenzaba su descenso, nos dirigimos a la playa de Valdearenas, donde, en un espléndido atardecer, la brisa marina se entre las dunas y el aroma a pinos. Descalzos y con los pies hundidos en la arena fresca pasearon junto al mar mientras el cielo se transformaba en un lienzo de tonos dorados, naranjas y rosas.
Allí, entre susurros de olas y alguna que otra risa, capturamos abrazos que hablaban de complicidad, paseos con las manos entrelazadas y, sobre todo, besos bajo un cielo muy interesante. Fue un momento en cierta manera íntimo, donde el tiempo pareció detenerse para ellos, y eso que habia algun bañista y gente pululando por allí. Las siluetas recortadas contra el atardecer que obtenimos con las fotos no solo eran una simple imagen, eran una promesa: la de caminar juntos, sin prisa, hacia un futuro compartido.
Un equilibrio perfecto
Esta sesión fue un viaje entre dos ambientes: la energía del bosque y la serenidad melancólica del mar. En los pinares, se mostraron juguetónes; ya en la playa, con mas rodaje, pienso que mas contemplativos. Cada foto cuenta una parte de su historia: la aventura, la risa, la calma y la conexión que los une más allá de las palabras.
Silvia y José Luis no solo se van a llevar buenísimas imágenes, se van a llevar también todo un tesoro de emociones: además de las risas que echamos haciendo la sesion, se llevarán el susurro del viento entre los pinos, el color de la arena y el mar al caer la tarde, la caricia del sol en sus rostros y la certeza de que, pase lo que pase, siempre tendrán este rincón de Cantabria como testigo de sus primeros pasos hacia el «sí, quiero».
¿Y vosotros? ¿Ya estais listos para convertir vuestro amor en un cuento de bosques, playas y atardeceres inolvidables?
¿Imagináis vuestra historia inmortalizada en un lugar así? ¡Hablemos y creemos juntos recuerdos que duren eternamente!
